En este artículo vamos a explicar las enormes ventajas que tiene la motorización de los toldos, así como la automatización delos mismos mediante sensores, para hacerlos más autónomos.

Hay una tendencia que hemos observado, donde cada vez son más los clientes que nos pide motorizar el toldo. Ello es debido a 2 factores principalmente, por un lado, está la mejora en calidad de vida, donde los toldos manuales requieren de un esfuerzo físico, siendo mayor en personas mayores, cuando con un mando a distancia desde el sillón de su casa los puede manejar. Por otro lado, se busca una autonomía del toldo mediante sensores que hagan que salga o se pliegue el toldo, así como su gestión a través de sistemas domóticos o simplemente mediante una app en el móvil.

Vamos a explicar de forma muy visual los principales sistemas de motorización y automatismos aplicable a los toldos.

Motorización

Los motores que se instalan hoy en día son todos tubulares, los cuales se instalan dentro del tubo de chapa que está en la parte superior del toldo, por lo que es

totalmente invisible para el cliente.

La tecnología más común hoy en día es su conexión vía radio, donde solo es necesario la conexión del motor a la red eléctrica. Por otro lado, llevaría un mando a distancia enlazado con el motor vía radio. También se podría poner interruptores de pared vía radio, aunque es menos usual.

Por otro lado, estarían los motores mecánicos, donde sí o sí, además de la conexión a la red eléctrica del motor, sería necesario que enlazara con un interruptor de pared mediante cableado. Esta opción es utilizada por ciertos usuarios, donde aprovechan los cables, para domotizar el toldo e incluso instalar un interruptor vía WIFI.

Automatismos

Aquí entrarían todos los sensores que se le pueden instalar a un toldo previamente motorizado, donde la variedad es amplia buscando siempre las necesidades del cliente.

Sensor de viento

Es el más habitual, ya que el cliente se asegura que, en caso de un viento fuerte, el toldo se recoja solo, de forma totalmente autónoma. Hay dos tipos, los que van con una veleta anemómetro o los que detectan vibraciones por oscilación del toldo. Éste segundo es más preciso, ya que el anemómetro está colocado en un lugar, donde no siempre las ráfagas de viento lo detectan al 100%, por ser algo impredecible. Por otro lado, con un anemómetro podemos gestionar varios toldos de una misma fachada, pero no es el caso del sensor por vibración, donde necesitaremos uno por toldo.

Sensor de sol

En este caso, el sensor capta la luz del sol, el cual, a unos determinados lúmenes, acciona el motor para que salga el toldo. En la mayoría de los casos este sensor va junto con el de viento en un mismo elemento.

Sensor de lluvia

En un captor de lluvia que, en caso de una determinada cantidad de agua, hace que el motor se accione. Se puede elegir que salga o se recoja el toldo, ya que para determinados tipos de toldos como la pérgola para la lluvia o en cerramientos de toldos para la hostelería, lo que precisamente se busca es que salga el toldo en caso de lluvia.

*Confiamos le haya sido de utilidad este artículo, ya que es muy importante que se tenga pleno conocimiento de los sistemas de motorización y automatización, tanto para el profesional a la hora de asesorar, como para el cliente. Si tienen cualquier duda o consulta estaremos encantados de atenderles.